El 15 de julio de 1997 el diseñador italiano Gianni Versace, en un momento inmejorable en su carrera, regresaba a su casa luego de tomar su tradicional café en Miami Beach.
Nunca imaginó que sería el último, ya que Andrew Cunnan -un asesino serial autor de otros cuatro homicidios, que era buscado por el FBI- lo interceptó y le dio dos balazos en la cabeza que terminaron con su vida casi instantáneamente. Un crimen que nunca fue aclarado del todo que generó una verdadera conmoción mediática, del que ya pasaron 24 años.
Luego del triste suceso, la fabulosa mansión quedó cerrada y luego fue pasando de mano en mano, hasta que en 2015 fue transformada en un hotel boutique de lujo llamado The Villa Casa Casuarina, donde el alojamiento por una noche parte está entre 800 y 1000 dólares.
El Palacio Versace -de estilo mediterráneo- fue construido en 1930 bajo el nombre de Casa Casuarina, está valuado en más de 70 millones de dólares y fue la residencia del diseñador italiano entre 1992 y 1997 quien la descubrió por casualidad, en una parada que hizo en la ciudad para visitar a su hermana Donatella Versace.
Se enamoró de ella nada más verla, sobre todo cuando vio a la estatua de Afrodita arrodillada, que era muy del gusto del diseñador que adoraba la mitología griega y romana. Compró el edificio de estilo español por 10 millones de dólares y el Hotel Revere de estilo art déco que estaba pegado a él, a pesar de que la Liga de Preservación de Diseño de Miami estaba en contra.
Se encuentra en el 1116 de Ocean Drive, en el barrio de South Beach en el distrito arquitectónico de Miami Beach.
Versace le realizó varias modificaciones, hasta dejarla convertida en una mansión exuberante de estilo neoclásico, en la que invirtió el triple de la suma que le había costado para remodelarla. En lugar de los 24 departamentos que tenía originalmente, quedó con una totalidad de 10, con sus paredes decoradas con frescos, 11 baños, una piscina, un observatorio, varios jardines y esculturas de bronce.
En 1993 Versace compró el hotel contiguo, en su momento llamado Revere Hotel (construido en 1950), por 3.7 millones de dólares, y lo demolió para construir una piscina y un jardín para su casa.
Antes de convertirse en hotel
Después del fatal incidente, la sobrina del diseñador Allegra Beck, heredó la propiedad cuando fue mayor de edad y su hermano, Daniel Beck, se quedó con la colección de arte que estaba dentro de la propiedad (las piezas se subastaron en Nueva York por 28 millones de dólares) . La familia estaba dispuesta a deshacerse de todo. Pronto, el magnate de las telecomunicaciones, Peter Loftin, compró la mansión por 19 millones de dólares y la convirtió en un club de lujo solo para socios. Como no resultó, intentó rentabilizarla ofreciendo tours por la casa, y finalmente lo intentó con un hotel de lujo. Pero el proyecto fracasó en todas las ocasiones y, en el año 2009, la Casa Casuarina estaba de nuevo en venta.
El empresario Barton G. Weiss la reabrió como The Villa by Barton G. Pero en 2012, su empresa se fue a la quiebra, y Weiss intentó vender la construcción por 125 millones de dólares sin éxito. Un año después, la mansión de estilo mediterráneo ya estaba en propiedad de la compañía Jordache Enterprises, que la había comprado por 41 millones y medio de dólares.
Los nuevos propietarios querían que el nuevo hotel mantuviese la huella del diseñador: los mosaicos, las molduras de oro, las columnas, los pórticos... Porque, a pesar de que Donatella Versace se empeñó en borrar el rastro de su hermano antes de venderla –a excepción de la medusa gigante que decora una de las paredes del jardín–, la casa seguía recordando a su dueño más célebre.
The Villa Casa Casuarina, que frecuentan de manera habitual celebridades como Paris Hilton, Tom Cruise y Matt Damon, entre otros. Allí es posible cenar langosta o caviar en su restaurante, llamado Gianni´s.
