Si estás en plan de renovar tu cocina pero la idea de meterte en obras engorrosas o desembolsar una fortuna no termina de convencerte, nada mejor que recurrir a uno de los recursos más simples, económicos y efectivos que existen: la pintura.
Este "caballito de batalla" tiene el poder de transformar por completo cualquier ambiente y lo mejor de todo es que ¡podés animarte a hacerlo vos misma y en un fin de semana!

De qué color pintar los muebles de la cocina
Si bien no hay reglas, lo más recomendable es ir por un color suave que aporte claridad a la cocina. El mercado actual ofrece un amplio abanico de tonalidades que van desde opciones pastel hasta neutros, oscuros y vibrantes…
También podés hacerte la siguiente pregunta: ¿cuánto tiempo se pasa en la cocina? La respuesta va a resultar clave para dar con una elección acertada.
Ejemplo: se elige un color demasiado intenso, como naranja o amarillo, puede generar fatiga visual y es probable que canse rápido si se pasan muchas horas en este espacio.

Paso a paso: cómo renovar los muebles de la cocina con pintura a la tiza
1. Desmontá las puertas y sacá los cajones
Si podés, demontá las puertas y sacá los cajones para que limpiarlos y pintarlos sea más fácil y cómodo.
2. Sacá los tiradores
Para evitar posibles accidentes como derrames de pintura, lo mejor es sacar los tiradores. Después podés volver a poner los mismos o unos nuevos bien cancheros.
3. Realizá una limpieza a fondo
Antes de pintar los muebles es súper importante que elimines todo rastro de suciedad que pueda dificultar el agarre de la pintura. Después de limpiar cada superficie hay que dejarla secar.

4. Tené a mano los materiales
- Pintura de imprimación
- Pintura a la tiza
- Bandeja de pintura para rodillo
- Rodillo flocado
- Pincel
5. Aplicá una mano de imprimación
La imprimación es un recubrimiento previo que se aplica sobre la superficie antes de la capa de color. Es un producto similar a la pintura pero que no otorga un acabado final, sino que asegura la adherencia de la pintura a la superficie y garantiza más durabilidad y una mejor apariencia.
Una vez aplicada la capa de imprimación, hay que dejar secar las superficies durante 4 horas aproximadamente antes de empezar a pintar.

6. Aplicá la primera mano de pintura a la tiza
Para superficies lisas, como la puerta de la alacena o algún mueble de la cocina, usá directamente el rodillo para ir rápido y ganar tiempo. De lado a lado y de arriba hacia abajo.
Una vez cubierta toda la superficie, hay que dejarla secar por unas 4 horas aproximadamente para luego darle una segunda mano (cuanto más oscura sea la superficie, más manos de pintura le vas a tener que dar).
Un tip: para que te sea más fácil y cómodo pintar, podés colocar varios recipientes como tarros de pintura debajo las superficies para que queden más elevadas.
7. Repasá las partes más difíciles
Con la ayuda del pincel, vas a repasar las partes más difíciles (como molduras o algún tipo de relieve) para garantizar un mejor acabado.
