Esta casa de fin de semana fue pensada desde cero como un espacio para el descanso, donde sus dueños pudieran ponerle pausa al ritmo frenético la ciudad y conectar con la tranquilidad del campo.
Rusticidad, simpleza, líneas orgánicas e inspiración mediterránea fueron los conceptos que combinaron las arquitectas Josefina Casaux Alsina y Milagros Silva Nieto, del estudio Cardinal, tanto para resolver su arquitectura como su diseño interior.
Una puerta rústica para una casa mediterránea desde la fachada

Una puerta rústica de dos hojas y dos faroles de hierro óxido definen la fachada de la casa, dueña de una absoluta simpleza. Como buen exponente del estilo mediterráneo, la sucede un patio central que actúa como corazón de la casa.
La puerta de entrada es idéntica a la del exterior -en madera maciza de dos hojas- y está coronada por una pérgola de madera de eucaliptus estacionado. Los arcos de vidrio fijo que la secundan tienen marcos de PVC foliado Turner Oak que acentúan su presencia.

La importancia de los elementos rústicos en el estilo mediterráneo

El uso de elementos rústicos fue clave para darle identidad a la casa: la puerta de acceso de madera maciza, las lámparas de hierro y los caminos de durmientes, integran la construcción con su entorno de una manera armónica.
Tonos tierra, maderas y fibras para un living en modo relax

“Nos propusimos que el living comedor tuviera la misma onda relajada que el resto de la casa”, comentan las arquitectas Josefina Casaux Alsina y Milagros Silva Nieto (@cardinal.estudio).
El espacio, que cumple el rol de un núcleo central -se accede desde el patio, y conecta con la cocina, el playroom, el sector dormitorios y la galería- apela a una deco en clave natural, acentuada por la onda mediterránea que imprimen los arcos vestidos con cortinas de gasa pañalera.
Predominan aquí los tonos arena, el blanco cálido y la madera, presente en la mesa de centro de castaño (@familiaechaide).
El mueble que acompaña al hogar insertable (Tromen) se hizo a medida en petiribí (@cardinal.estudio).

Los arcos son un elemento clave en la arquitectura mediterránea
“Los arcos se van repitiendo en algunos lugares claves de la casa, por ejemplo en las ventanas del living hacia la galería, en el acceso a la cocina o en el playroom, evocando la onda mediterránea que queríamos lograr”, describen las arquitectas.
El resultado es una casa que no solo responde a las necesidades funcionales de la clienta, sino que también transmite la sensación de escapada y descanso que ella imaginaba desde un principio. Un hogar que es un refugio”.

Un comedor de estética natural y minimalista
El comedor tiene una estética natural, relajada y minimalista, con fuerte presencia de elementos artesanales y una influencia clara tanto del diseño wabi-sabi como del estilo mediterráneo.
Cada elemento fue cuidadosamente elegido para transmitir calma y conexión con lo orgánico.
La mesa es de madera de castaño (@familiaechaide) y se corona con las lámparas de la colección (@lafelizestudio). La consola ubicada por detrás, también en madera de castaño, reúne pocos elementos decorativos elegidos con criterio.
Dos grandes arcos a cada lado, y una abertura con arco hacia la cocina, completan el espacio.

Detalles de una cocina increíble: tapa de la revista para ti DECO
En la cocina semi integrada al comedor (tapa de la última edición de para ti DECO) se buscó seguir con la misma estética de toda la casa en cuanto a materiales y colores.
El amoblamiento se definió en melanina ranurada Camelia, con mesadas de Purastone blanco que aportan un necesario contraste.
Sobre la isla con diseño en “L”, con mesa y bancos de petiribí como apéndice y desayunador, lámparas colgantes (@margaritadeforteza). En las ventanas, cortinas de bambú suman textura y profundidad.

“La idea del vidrio repartido era lograr integrar también el playroom con la cocina, pero con la posibilidad de darle cierta independencia. Quisimos mantener las curvas que se van generando en los diferentes ambientes de la casa para continuar con ese hilo conductor”, detallan las arquitectas.

Clima de calma y relax para un dormitorio luminoso

El dormitorio principal transmite una atmósfera de relajación total y conexión con lo natural, con toques rústicos y boho chic: dan cuenta de ello las lámparas colgantes de fibras que caen sobre las mesas de luz.
Se utilizó aquí una paleta neutra y terrosa, dominada por los blancos, beige y marrones. Los textiles de algodón y lino en la ropa de cama aportan una sensación de suavidad.

En el baño de la suite, la mesada es de durlock reforzado y revestido en el mismo microcemento de las paredes para lograr uniformidad, con bachas artesanales de piedra (@bachasmingo), grifería en acabado dorado (Peirano) y un par de espejos de líneas orgánicas en madera de guayubira (@Valeriacrida.home) diseñados especialmente para el estudio (@cardinal.estudio).
Los aires del mediterráneo le sientan bien a los exteriores

La galería continúa con la misma estética que el interior de la casa, con impronta boho chic y natural coronada por el techo tipo pérgola de eucaliptos.
Las aberturas en forma de arco añaden carácter y rompen con las líneas rectas tradicionales, generando una estética suave y envolvente. El mobiliario genera una composición descontracturada pero armoniosa, pensada para el descanso.
La mesa del comedor de exteriores es de madera de eucalipto (@valeriacrida.home), acompañada por sillas Mar del Plata, ventilador de techo con aspas de mimbre y apliques de pared tejidos que se mimetizan con el color de los muros.
Al fondo, la barra de la parrilla de hormigón se acompaña de una mesada de quebracho blanco (@valeriacrida.home). Sobre la mesa, florero (@casaclara.ba), lámparas doradas (@altoranchocom) y fuente con limones (@food.and.stories).
En otros sectores de la galería sorprenden además los grandes postigos -hechos a nuevo por un herrero.

Producción: Malu Satzger. Fotos: Christian Beliera.