Pocos aromas despiertan tanto placer como el de la canela recién horneada. Estos rollitos de canela —o cinnamon rolls— son una versión rápida y sencilla del clásico roll dulce americano. No requieren largas horas de levado ni experiencia en panadería: en apenas una hora vas a tener en tu mesa unos bollitos suaves, dorados y con ese toque especiado que los hace irresistibles.
Perfectos para un desayuno especial, una merienda con amigos o para llenar la casa con perfume a hogar.
Ingredientes (para 12 unidades)
Para la masa:
- 145 g de harina de repostería
- 200 g de harina de fuerza
- 7 g de levadura seca de panadería
- 50 g de azúcar
- 25 g de manteca
- 1 huevo (tamaño L)
- 120 ml de agua
- 60 ml de leche
- 5 g de sal
Para el relleno:
- 55 g de manteca
- 80 g de azúcar mascabo o moreno
- 10 g de canela molida
- 5 ml de esencia de vainilla
Para el glaseado (opcional):
- Azúcar impalpable
- Unas gotas de agua o leche
Paso a paso: cómo hacer rollitos de canela en una hora
1. Prepará la masa.
En un bowl grande, mezclá las harinas con la levadura y la sal. Hacé un hueco en el centro. En otro recipiente, calentá la manteca junto con el azúcar, el agua y la leche hasta que la manteca se derrita. Verté esta mezcla tibia en el centro de la harina y agregá el huevo.
2. Amasá y dejá reposar.
Mezclá hasta obtener una masa pegajosa. Amasá a mano o con batidora hasta que esté suave y elástica. Cubrí con film y dejá reposar unos 5 minutos.
3. Formá los rollitos.
Estirá la masa sobre la mesada enharinada hasta formar un rectángulo de unos 40 x 20 cm. Untá con la manteca del relleno, espolvoreá la mezcla de azúcar, canela y vainilla, y enrollá. Cortá en 12 porciones iguales.
4. Leudado express.
Colocá los rollitos en una fuente de horno (30 x 20 cm), cubrilos con papel de aluminio y llevá al horno precalentado a 90 °C. Apagá el horno y dejá que leven allí durante 25 minutos.
5. Horneá y glaseá.
Retirá el papel de aluminio, encendé el horno a 190 °C y horneá de 15 a 18 minutos, hasta que estén dorados. Dejalos enfriar unos minutos y, si querés, pincelalos con un glaseado liviano de azúcar impalpable y leche.
Tip
Podés sumar un toque especial agregando nueces picadas o chips de chocolate al relleno. Si te gusta un sabor más intenso, mezclá la canela con una pizca de jengibre en polvo o cardamomo.
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