Las blooming nails son la última tendencia en nail art que conquistó a la Gen-Z y ya se instala como una de las manicuras más pedidas del año. Su nombre significa literalmente “uñas florecientes” y hace referencia a su efecto visual: un diseño que parece expandirse como una flor o una acuarela sobre la uña.
Esta técnica se basa en un tipo especial de gel, llamado blooming gel, que permite que los colores se difuminen entre sí creando formas abstractas, orgánicas y llamativas. El resultado es una explosión de color que se adapta a distintos estilos, desde los más psicodélicos hasta los más delicados.
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Como muchas otras modas de belleza, las blooming nails nacieron en Asia, más específicamente en Corea del Sur, y fueron ganando popularidad en Europa y los Estados Unidos gracias a las redes sociales. Hoy, este estilo pisa fuerte en la Argentina y se consolida como el elegido para destacar el bronceado y romper con los diseños clásicos.
Cómo se hacen las blooming nails
La técnica requiere precisión y algunos productos específicos. Te contamos los pasos generales:
- Paso 1: Se prepara la uña con una base en gel como en cualquier manicura semipermanente.
- Paso 2: Se aplica una capa de blooming gel, que no se cura de inmediato con lámpara UV.
- Paso 3: Sobre esa base húmeda, se colocan los colores que formarán el diseño. Estos se “abren” y expanden por sí solos, generando el efecto blooming.
- Paso 4: Una vez logrado el diseño deseado, se cura en lámpara y se sella con top coat.
Este tipo de nail art permite jugar con combinaciones infinitas de colores y efectos, desde flores hasta formas psicodélicas tipo tie-dye.






- Efecto floral acuarelado: Ideal para quienes aman los diseños suaves y románticos.
- Psicodélico multicolor: Perfecto para looks más jugados y festivaleros.
- Monocromático con contraste: Un fondo nude con detalles en un solo color vibrante para un toque sutil pero original.
- Inspiración Y2K: Tonos neón, pasteles o metalizados combinados al mejor estilo 2000s.
Además de su impacto visual, esta técnica tiene un gran beneficio: es súper personalizable. Cada diseño es único y podés adaptarlo a tu estilo, temporada o estado de ánimo. Además, potencia el bronceado y queda increíble en uñas cortas o largas.
Si estás buscando un cambio en tu manicura o querés probar algo distinto, animate a este estilo que no pasa desapercibido.
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