Cuando las luces del estudio de “Telenoche” se apagan, Luciana Geuna deja por un rato el traje de periodista y se pone el de esposa y mamá. La cuenta de Instagram de la rosarina combina las fotos en el set y las de la familia y amigos, los grandes pilares de su vida. Sin dudas que Jacinta y Vito, los hijos que tuvo fruto de su amor con Martín Guglielmone, son las luces de sus ojos.
“Vivir la vida con ellos y a través de sus ojos de infancia. Mirar el mundo con la inocencia, la alegría, la libertad, la bondad y la bomba de amor que son. Me enseñan tanto...”, describió en un posteo que hizo en las redes sociales hace poco. La familia afianzó su convivencia a lo largo de la cuarentena, si bien ella siguió saliendo de casa por ser personal esencial, los chicos recién en la actualidad están retomando la prespecialidad.
Como muchos padres, se vio obligada a ingeniárselas y disfrutar de las largas horas de convivencia que se presentaron a raíz del aislamiento. “Éste núcleo de amor es lo que me hace más feliz en mi vida”, manifestó en agosto del año pasado cuando le tocó celebrar su cumpleaños en la austeridad de su hogar y sin la presencia de otros seres queridos.
Muchas veces, en el marco de la vorágine en la que viven los periodistas, suele pasar que una acción muy normal como es que un hijo visité a la mamá en el trabajo no se da. Es que la rutina a veces marca que de una redacción se van a un canal de televisión o una radio, algo que no termina siendo cómodo para un menor. Pero Luciana se logró dar este espacio cuando llevó a Jacinta y Vito a Radio Con Vos, cuando tenía un programa en esa emisora durante 2019.
Buscó replicar su vida de Rosario en Buenos Aires
Nacida en Rosario, una gran ciudad que a la vez presenta cierta tranquilidad, Luciana buscó conseguir esos factores al instalarse en el barrio porteño de Coghlan, que es similar a Alberdi, de esa zona de Santa Fe.
“Vivimos en una casa. Tenemos amigos del barrio. También mis hijos se crían, potrean acá en la esquina. Es un barrio casi sin autos. Un barrio de Capital, encerrado entre vías. Medio que me traje Rosario acá, pero me falta mucho el río. Es tremendo. El río no se puede reemplazar”, le contó hace unos años al diario La Capital.
Sobre cómo combina el trabajo con la familia: “Yo llevo a los chicos a la escuela, yo estoy cuando vuelven de la escuela. No estoy a la noche, que es un montón, pero estuve todo el día. Estoy mucho. Los llevo a las actividades. Tengo mis horas de trabajo en casa, pero fui logrando compatibilizar. A veces obviamente tengo desbordes del trabajo. Me voy de vacaciones y corto todo. Me desconecto. Y lo puedo hacer. Me asustaría que un día no lo pueda hacer”.
