#BookDeLaSemana Sofía Pachano: “MasterChef es un subibaja: ha sido todo muy sorpresivo” - Revista Para Ti
 

#BookDeLaSemana Sofía Pachano: “MasterChef es un subibaja: ha sido todo muy sorpresivo”

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Ha crecido a pasos firmes y seguros en su carrera como artista y actual productora. Supo despegarse con clase y estilo propio del mote de ser la hija de Aníbal Pachano y Ana Sans, dos grandes talentosos artistas del teatro y la danza, entre otras cosas. Sofía tiene personalidad. En esta entrevista nos cuenta todo sobre su participación en MasterChef Celebrity, su lectura sobre la pandemia y los recaudos que toma, su percepción sobre las críticas en las redes sociales, la relación con sus padres, la maternidad, la soltería y muchos temas más.

Sofía Pachano en la producción de Para Ti, al aire libre, y con la mano vendada con un pañuelo para tapar la quemadura que se hizo cocinando en MasterChef Celebrity.

Tengo a Sofía frente a cámara, vía zoom. Me cuenta que está agotada por la cantidad de horas de grabación, tiene una mano totalmente vendada que logro ver cuando se acomoda cada tanto el pelo. Ante cada pregunta, responde sin dudar y se explaya entre risas, reflexiones con mucho histrionismo. Después ella posará para el fotógrafo de Para Ti en la huerta al aire libre y manteniendo la distancia que impone el protocolo por covid, en Tomate (@tomate.estacion), un bar palermitano.

-¿Hacer MasterChef Celebrity fue una de tus primeras salidas durante la cuarentena y la pandemia?

-¡Sí! La verdad es que fue como “salir de la covacha”. Veníamos todos guardados respetando el aislamiento obligatorio y nosotros, que trabajamos en el arte, estábamos frenados laboralmente. Yo estaba en mi casa del campo. Fue volver a la ciudad con todo lo que eso implica, pero estoy muy contenta porque creo que es un proyecto único en el año, en el país, en el medio de esta crisis existencial que se está viviendo. Tener trabajo y de algo que amo como es cocinar es genial (sonríe).

Pasó gran parte de la pandemia alejada de todo en su casa en el campo donde invitó a su padre, Aníbal Pachano, para pasar un tiempo juntos. “Él se adaptó a mis reglas…imaginate: mi viejo ahora recicla y me pregunta cómo compostar en su casa”. Se nota el cariño que tiene por su padre y se sorprende con alegría al notar este cambio en una generación que estaba “acostumbrada a tirar plástico sin separar”.

Sofía con un look cómodo.

Mirá el video en el cual Sofía cuenta cuáles son sus 5 prendas favoritas a la hora de lookearse:

-¿De dónde surge tu amor por la cocina? ¿Aprendiste de alguien dela familia o sos autodidacta?

-Desde chiquita jugada a la “cocinita”. Jugaba a que el microondas era la cámara y que yo tenía un programa de televisión de cocina. Lo tenía muy arraigado. Hacía cosas (recetas) muy fáciles y mi mamá era mi asistente, me hacía de “Juanita”. Más allá de que no soy de la generación de “Doña Petrona”, mi mamá me la nombraba. Además yo me miraba todos los programas de cocina, me dormía con El Gourmet. Primero miraba “Utilísima”- recuerda entusiasmada- Choly Berreteaga, Maru (Botana), Dolli (Irigoyen) ¡las amaba a todas!. Luego los de la generación más nueva: Narda y todos los que se conocen ahora porque la gastronomía está como muy de moda. Hoy los chef son celebrities, marcan tendencia y también influencian en una manera de comer.

Sofía Pachano se crió rodeada de arte, entre bambalinas y butacas de teatros. Viene de una familia de artistas. De pequeña ya “solía hacer mis propios shows en Navidad, en Pascuas y en todas las fechas”. Sonríe con dulzura, tal como si estuviera viendo a aquella niña que se “hacía el vestuario con pedazos de papel de regalo”. Entre show y show, Sofía también agasajaba a los invitados de sus padres o amigos con sus recetas:

-Mi mamá siempre me cuenta que eso era algo regular para mí: yo cocinaba y después lo llevaba al colegio. Iba con la “bandeja multitudinaria”. Al ser hija única, mis amigos eran mi familia y siempre los quería agasajar desde chiquita.

Hicimos la producción en medio de una huerta.

-Comentabas anteriormente algo sobre los Chef como influencers, o que infunden tendencia. Vos lograste crecer a lo largo de tu carrera y luego de tu paso por la pista de Bailando por un Sueño estallaste en las redes sociales incluso hoy te sucede. ¿Te considerás también un poco influencer?

-Creo que hay que hacer una diferencia. La gente que trabaja en arte siempre también influencia. Siempre el actor es como un influencer, pero antes eso también existía cuando se los veía en las revistas. Ahora con las redes sociales se hizo masivo. Hay gente que ya nació de las redes (…) y que algunos toman el lugar como es el caso de Belu que llegó a la tele (Belu Lucius, la humorista influencer compañera en la competencia Master Chef Celebrity). En mis redes trato de ser lo más sincera posible. He perdido trabajos también (por serlo). Hay marcas de cocina que las rechazo porque no comparto su filosofía. No agarro todo por agarrar y creo que eso la gente que a mí me sigue sabe que lo que promociono es porque realmente lo consumo.

Mirá el video dónde Sofía habla de su plato preferido:

-En MasterChef Celebrity te tocó estar con tres monstruos de la cocina como Donato de Santis, Germán Martitegui y Damián Betular. ¿Tenías admiración por ellos de antes?

-Al que menos conocía era a Damián (Betular) pero soy consumidora del Palacio Duhau (N. de R: Damián Betular es Chef Ejecutivo de dicho espacio). Él es pastelero de ese lugar y he ido muchas veces a merendar o a cenar allí porque es un sitio que sabes que tiene calidad de servicio y gastronómica. No sabía que él era el responsable, pero ya consumía sus cosas.

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Sofía recomienda tener plantas aromáticas en casa.

De Donato siento admiración porque lo veía en El Gourmet y además es un exponente en este país de la cocina italiana y yo soy de familia italiana. Donato es una eminencia. Y con respecto a Germán, más allá de que en MasterChef se hizo muy popular, él ha llevado la cocina argentina desde su restaurante a los “50 mejores” restaurantes del mundo. Para mí es uno de los más grandes: primero está Francis Mallmann y después para mí viene él, en cuanto a hombres hablando de generaciones. Para mí es muy fuerte tenerlos ahí.

Mirá el video en el que habla de sus pasiones:

Sofía en MasterChef Celebrity. Foto: IG.

-Nombraste a Germán Martitegui quien fue internado el lunes pasado con neumonía por coronavirus y hoy por suerte ya está en su hogar y de alta ¿Como tomaste la noticia de su internación, te comunicaste con él?

-Con Germán no tenemos contacto, pero sí a través de la producción estoy enterada y espero que se recupere pronto y vuelva pronto porque es un jurado muy importante para nosotros. Me pasó como con mis otros compañeros (hace alusión los otros participantes que también se enfermaron de coronavirus) no me comuniqué más que por intermedio del equipo.

-Cuando te comunicaron que tus compañeros enfermaron, ¿no te dio miedo? ¿Los hisopan muy seguido?

-Nos hisoparon ahora en este caso y al principio. Yo me estoy cuidando mucho. Masterchef te lleva muchas horas. Grabo 4 días de cinco y son muchas horas paradas. Ya vinieron los reemplazos de El Polaco y de Vicky Xipolitakis (Natalie Pérez y Christian Sancho). Mis amigas me dicen que me cuide porque se están contagiando todos, pero me puedo contagiar en cualquier lado. En el único momento en que estamos sin barbijo es durante la grabación. Y hay dos personas que yo les llamo “los policías del Covid” porque cuando nos ven cerca nos gritan para que nos alejemos. Al finalizar la grabación todos nos ponemos el barbijo. Creo que si se hubiera dado en la grabación podríamos haber caído muchos más. Los protocolos son realmente muy correctos. Después en la vida no sabemos dónde se dieron sus contagios. Yo soy hija única, imaginate que a mis papás los asisto yo si necesitan algo. Mi papá es un paciente de riego y si viera algo extraño me retiraría por lógica.

Al momento de esta nota todos habían sido recientemente hisopados y habían dado negativo.

Sofía reveló que de chiquita amaba cocinar.

-Hay rivalidad dentro del programa, en las redes sociales se te tildó de poco solidaria en especial en aquel episodio con Roberto Moldavsky, ¿cómo se llevan entre ustedes?

-Nuestras grabaciones son de 8 horas. Le podés preguntar a cualquiera de mis compañeros si ayudo o no.

Mirá el momento en el cual hizo el mejor plato de la competencia en MasterChef Celebrity:

-A veces por una sola acción la gente opina por lo que ve. Además es un formato reality y la edición puede no mostrar el todo…

-Lo que salió fue la pregunta número 50 de Moldavsky porque es un inseguro. “Confiá Moldavsky, tirá el pollo a la sartén”. Eso le dije. No es que no lo quería ayudar. De hecho él dice que hay una anécdota entre nosotros que va a incluir en un monólogo porque fue genial (sucedió antes de grabar): “¿qué hago con lechuga, manzana y sésamo? -me dice.

El sésamo no, pero hacé una ensalada de navidad Moldavsky!- le digo.

¿Me estás jodiendo?, ¡soy judió bolu!-remata el cómico”.

Hubo una semana en que me criticaron también por ayudar al Polaco (hace una pausa). La gente va a criticar lo que quiera criticar porque proyecta. No puedo cumplir las expectativas de todos los que nos miran. Trato de quedarme con el vaso medio lleno.

-En redes te tildaban de soberbia…

-Yo miraba y me quedé pensando: ¿por qué están diciendo que soy soberbia?, ¿realmente doy esa imagen? Fede Bal contestó el otro día planteando: ¿quererse uno mismo es ser soberbio? Si por ejemplo te digo: “me gusta mi pelo” por el solo hecho de decirlo, ¿soy soberbia? No!, simplemente dije que me gusta mi pelo.

Como la gente un día te quiere, un día te odia. Siempre estoy agradecida al público. El arte es subjetivo, como el paladar en la comida… Si no te gustó, ¿qué puedo hacer?

Pero si me decís soberbia y no me conoces es diferente a que si una amiga o alguien que me conoce me dice algo así. No cuestiono solo la crítica; cuestionó también el fanatismo.

-Te apasiona hablar de gastronomía, ¿hiciste algún curso verdad? También te han comparado con el caso de Samanta Casais del programa Bake Off (Telefe) quien quedó descalificada al llegar a la final por una irregularidad en su declaración jurada.

-Sí. Estudié en el IAG (Instituto Argentino de Gastronomía) y la gente de producción lo sabe. A mí de golpe me decían estás mintiendo como Samanta la ex de Bake Off pero yo la verdad que no lo veía. Vos estudiás y te recibís como cualquier cocinero con técnica, pero me ponés 60 minutos en la cocina de MasterChef y yo me quemo la mano (muestra una de sus manos envuelta en un vendaje y ríe). Puedo tener un poco más de técnica, pero a la hora de hacer depende del azar. Entiendo, tengo ideas, pero no me siento ser la mejor ni que estoy fuera de concurso.

Mucha gente decía: “No es válido” ¿Vos te pensás que la producción me va a convocar sin saber? ¡No subestimen a la producción de MasterChef! (rompe en risas).

La comparan con Samanta Casais, pero ella dice que son diferentes.

-¿Te molestó un poco esa comparación con Samanta Casais entonces?

-Primero, somos personas diferentes. Yo no la quiero matar a Samanta, pero nunca mentí. Mucha gente miente para llegar a un lugar. Tampoco hay que juzgarla. Hay gente que miente con cosas en el curriculum. Nunca es bueno descalificar tanto a un otro, creo que todos podemos confundirnos (cometer un error), creo que ella lo admitió y no deja de ser lo que es: es buena cocinera. De hecho llegó hasta esa instancia por sus propios méritos. No era profesional, la producción me lo comentó.

En estos “talent show” se necesitan todos los colores del arco iris: el que es más “ñoño”, el que sabe un poquito más, el que no sabe nada, el que es más chantún, el que es más confrontativo, la mamá de todos o el papá de todos. Necesitás de todo eso para que al momento del show, aunque nosotros cocinamos de verdad, se vea atractivo. Si todos supiéramos cocinar sería aburrido. Es re divertido que El Turco García haga unas “mollejas con caviar” que fue algo que salió de él porque él es así, porque no sabe cocinar. Yo lo ví y me morí. Eso al show le suma.

-Como toda competencia por pruebas, nada está dicho. Pasaste de tener una medalla dorada y ser según Donato De Santis “el mejor plato de la competición hasta ahora” a llevar a la zona de peligro a tu propio equipo. ¿Te sentiste un poco la favorita de alguno de los chefs al inicio?

-Un poco es parte del show, (pero al inicio) Germán Martitegui pasaba por mi mesa y decía: “hay mucha expectativa con tu plato”. Es que cuando ellos googlearon quizás vieron que era una de las que más cocinaba junto con Ileana Calabró. Pero yo siempre digo: “no pongas expectativas porque siempre te pueden hacer chocar contra una pared”. Yo voy como nada y después, quizá pueda sorprenderte como sucedió en esa oportunidad. En el programa, siempre trato de ponerle lo mejor (…) pero todo varía. Un día te va bien y otro te va mal; un día estás arriba y otro abajo. Al final de la temporada recién se podrá saber quién evolucionó y las enseñanzas de cada uno. (Esta semana Sofía arrastró a sus compañeras de equipo Analía Franchín y Leticia Siciliani hacia lo peor. El jurado denominó a su plato como “el peor de la noche”).

-¿Hasta ahora MasterChef qué enseñanzas te está dejando?

-Mi enseñanza de esto es que más allá de que yo sepa cocinar, hay pruebas que yo no cocinaría nunca en mi casa. Más adelante lo van a ver, pero yo tengo una quemadura de segundo grado -se ríe y aclara- eso también es MasterChef, es ponerte a prueba y entender por lo que pasa la gente en la cocina.

Sofía lo compara este accidente como cualquier eventualidad que pueda sucederle sobre un escenario: “Se me cae la peluca, me la saco y sigo bailando” dice.

-¡Cosas como estas suceden en la cocina, llamaradas como cuando estaba friendo pollo! (N. de R: se vieron fotos en redes de una gran llama de fuego sobre su rostro que afortunadamente no la lastimó) También le pasa a otros, Moldavsky se quemó esta semana! -comenta y nombra más incidentes como “cortarse los dedos”: ¡están todos cortados! (…) En la seguidilla de los programas que vienen, no es que lo esté spoileando -aclara- pero se ve un avance de todos. Probablemente a ninguno de mis compañeros que les interese mucho la cocina ¡hay cosas que hubieran aprendido nunca! Es genial ver cambios en gente que no cocinaba o solo cocinaba milanesas con puré y de golpe hacen cosas que decís: “Che!” (hace un gesto de asombro).

Confiesa que le gustaría tener pareja.

-¿Vos te sentís más cómoda cocinando dulce o salado?

-A mí la pastelería, por ejemplo, no me gusta. La respeto muchísimo; es una de las cosas más difíciles de realizar porque es química. Hay que aceptar para qué cosas uno es bueno y para cuáles no. Soy más de cocina salada.

-Sos vegetariana y en la competencia de Masterchef te tocan platos que no lo son, ¿cómo te manejás con ese tema?

-Eso lo estuve leyendo mucho en las redes. No te pueden obligar si vos tenés una filosofía. Pero hay que entender que MasterChef no es: “yo cocino lo que quiero”. ¡No!, esto es como si yo voy a trabajar a una cocina donde vienen comensales que comen carne y otros que son vegetarianos.

Hace un año (noviembre) que soy vegetariana; me encantaban los asados y comer carne pero ahora mi filosofía cambió. Si me obligás a probar no me gusta. Pero entiendo que hay que probar el sabor, por ejemplo si bien la carne está ahí pruebo un poco de la salsa.

Ser vegetariana te cambia el paladar además del organismo, es muy fuerte. Me siento mucho más liviana. La vida en este país es carnívora, yo admiro al movimiento vegano porque realmente llevan su bandera por los animales. A mí el vegetarianismo me llegó por el lado de la salud.

Mi filosofía hoy es que cada vez que te estas comiendo un animal te estas comiendo algo que vivía. Pienso que si uno va a matar un animal es bueno saber cocinarlo todo, cosa que pasó también en MasterChef. Es como dijo Germán Martitegui: “hay que entender eso como un ritual y no comer solamente una parte y desperdiciar el resto”.

A propósito de esto Sofía comenta que justamente se encuentra leyendo un libro de recetas de cocina Argentina del 1800 que trata sobre ese tema entre otras cosas (Juana Manuela Gorriti.“Cocina Ecléctica”).

-Además de MasterChef estás en radio en Perros De La Calle (Metro) ¿Seguís con tu columna sobre la vida de soltera o tu corazón está ocupado?

-La columna va variando. Yo estoy “soltera” hace 4 años. Ahora digo que estoy sin rótulo: no estoy de novia pero no estoy soltera. Un poco la vida es así. Un día estás de novia con un proyecto; al otro día se fue de tu casa -ríe mientras habla- ¡No sabés lo que te puede pasar! ¡La vida es muy cambiante!.

-¿Siempre fuiste tan relajada o te fuiste moldeando después de los 30…?

-¡Noooo! ¡Yo fui criada con Disney y con el príncipe azul! Además influyo todo el movimiento feminista que está sucediendo, a mi eso me cambió la vida. Nosotras las chicas de los ochenta fuimos criadas con una bajada muy clara de cómo tenías que ser: que tenías que tener hijos, ¡que si decidís no ser madre te critican porque no te realizás como mujer! ¡Eso es de terror!. ¡Un hijo no es una realización, un hijo es una elección!

-Con tus padres has tenido altos y bajos en la relación, ¿cómo están actualmente?

-Hemos pasado muchas cosas. Ahora más de grande acepto que cada uno hace lo que puede y que ya la vida es dura. Es mucha responsabilidad tener un hijo y hay que aceptarla.

-Muchas chicas de tu generación como Juana Repetto decidieron ser mamás solteras rompiendo los estereotipos, ¿Te gustaría ser mamá?

-A mí me encantaría ser mamá. Me gustaría tenerlo en familia con un “otro” pero puede ser que en un futuro te conteste otra cosa. A mis 31 casi 32, te contesto eso. Soy hija de padres separados desde los 6 años, imaginate que podría decirte otra cosa.

-Uno siempre mira a los padres para bien o para mal ¿Qué características rescatarías del modo en que te criaron Ana y Aníbal a vos?

-Yo fui de chiquita, muy sobre adaptada. No se los critico porque es la vida y es lo que ellos pudieron hacer conmigo. Yo me sobre adapto todo el tiempo a las situaciones de la vida y siempre las transito. Esto de dormir la siesta en un teatro (reflexiona) bueno quizás un niño tiene que tener sus tiempos. Mi papá me dice que lo estoy criticando, pero hay cierta edad con tiempos que vos necesitás. A mí todo eso que me generó la sobre adaptación, también me hizo una excelente productora. Siempre tenía que ser muy ordenada porque si me olvidaba un libro no llegaba a hacer tal cosa.

Mi amiga que es pediatra, fue madre hace poquito y me dice: “nada de lo que pudiste imaginar es”. Entonces pienso que todo lo que pueda llegar a pensar (sobre cómo criarlo) se va a venir abajo en un instante (ríe). También está bueno ser consciente que cuanto vos traes alguien al mundo estás dejando un montón de cosas, del ego sobre todo. Cuando traiga a alguien a este mundo me gustaría estar bien yo. Porque tengo que estar dispuesta a hacer lo mejor que pueda.

-Bueno pero suena como si tus padres no hubieran pensado cuando te trajeron al mundo…

-No, no. ¡No lo pensaron! Mi papá me dice que cuando mi mamá le contó que estaba embarazada él se quedó en silencio por una hora. Y le digo: “papá no podés ser tan limitado, estás casado, teniendo relaciones sexuales sin preservativo ¿qué te pensaste? ¿cómo te vas a quedar en shock? Era por la sorpresa, pero uno más uno es dos. No lo juzgo igual, porque cada uno lo vive todo como puede.

-¿Te ves en la final de MasterChef Celebrity 2020?

-Este programa es un subibaja. No se sabe. Ha sido todo muy sorpresivo y jamás decretaría algo. Me gustaría llegar a la final. Eso sí. Las pruebas se ponen tan complejas que pasarlas sería como una superación personal, como esto de haberme quemado la mano que sucedió en una situación tan compleja que no lo hubiera hecho nunca. Probé cosas nuevas, cocinar carnes, voy a poder cocinarla para mis amigos…esas cosas me voy a llevar del programa.

-Entonces, ¿con quién te gustaría llegar a la final?

-Nos llevamos muy bien, el grupo es muy bueno y se refleja en el rating. Obviamente hay más afinidades con unos que con otros. Pero no es blanco o negro. A la final creo que son 4 y me gustaría llegar con Leti (Siciliani) con el Turco (García) y con el Polaco porque tengo muy buena onda y a medida que pasan las instancias necesitás de esa buena onda para poder sobrevivir. Porque sino entre la presión de la prueba y lo otro, colapso. También me gustaría llegar con Claudia Villafañe y con Boy Olmi. Son muy contenedores. Yo el otro le decía a Claudia que es muy agradable estar con ella porque yo a mi mamá no la veo desde hace tiempo.

Sofía es una apasionada de cada actividad que elige practicar. Respecto de los contagios y la pandemia, como productora artística considera importante que “el teatro vuelva a abrirse aunque sea para pocos, con todos los protocolos así como lo hizo MasterChef”. Está preocupada por el rubro del arte con el que se crió y en el cual se mueve como pez en el agua: “No es solo el actor, es el técnico de la luz, el que limpia el teatro y son muchísimas familias” dice muy seria. Lejos de ser pesimista Sofía cree que “estamos arruinando el mundo y esta es la primera de mil que vamos a vivir”. Confía en la llegada de una vacuna pero es realista sabe que tomará tiempo. En el mientras tanto, seguramente Sofía hará lo que siempre supo hacer, lo que aprendió pequeña, una vez más se adaptará, aceptará y se moverá hacia adelante. Es que Sofía Pachano, está en constante evolución, ni los cambios ni el tiempo la corren, tiene claro que está en constante evolución. Quizá ése sea su gran motor.

Producción: Marité Rizzo

Fotos y edición de videos: Chris Beliera

Pelo: Facu Solís

Ropa: Mila Kartei

Agradecimiento: Tomate (@tomate.estacion) por haber prestado las instalaciones para poder realizar esta producción.

Más información en parati.com.ar

   

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