La princesa Amalia participa, hace meses, de los eventos oficiales como heredera al trono de los Países Bajos. Habiendo debutado en una gira por el Caribe oficialmente en febrero de 2023, este jueves 27 de abril se robó todas las miradas en la celebración del Día del Rey en la que participó junto a su familia, que se unió a los ciudadanos en un gran festejo en las calles de Rotterdam.
Sonriente y entusiasmada, Amalia le dio rienda suelta a la espontaneidad y no se privó de relacionarse con la gente, que la buscó en todo momento y la arengó a sacarse selfies.
Su actitud da a pensar que es legítima heredera del carisma de su mamá, Máxima, quien desde hizo sus primeras apariciones en público como prometida del futuro Rey, dio que hablar con su simpatía y su calidez.
Y demostró, en su boda con Guillermo Alejandro, que la ruptura del protocolo iba a ser una constante: se permitió emocionarse hasta las lágrimas frente a los ojos del mundo durante la ceremonia, cuando la orquesta interpretó Adiós Nonino, el icónico tango de Piazzolla.
Amalia, la royal favorita de la Gen Z
Nacida en 2003, Amalia pertenece a la generación familiarizada con el uso de la tecnología digital, internet y los medios sociales desde una edad muy temprana.
Es consciente de que una imagen vale más que mil palabras y que la espontaneidad es ponderada: en la era de los filtros, curiosamente, la Gen Z valoran la naturalidad y la actitudes genuinas, rasgos que abundan en la personalidad de Amalia de los Países Bajos.
Durante los festejos del Día del Rey, coincidentes con el cumpleaños 56 de Guillermo Alejandro, el público propuso varios juegos y quería ver a sus representantes entregarse a ellos. Por eso, Amalia no dudó en improvisar algunos tiros al aro, mientras sus padres la observaban con orgullo.
Con el tiempo, la futura Reina de los Países Bajos irá definiendo cada vez mejor su manera de ser y, por lo que se avizora, la ruptura del protocolo será una constante, tal y como se lo ha marcado su madre.
Cómo enfrenta Amalia el bullying en las redes
Algunas semanas atrás, trascendieron las declaraciones de Guillermo Alejandro, cuando se refirió a cómo su hija está al tanto de lo que ocurre en las redes sociales. Si bien su investidura no le permite usarlas oficialmente, se sabe que tanto ella como sus hermanas tienen cuentas bajo seudónimos, en las que interactúan solo con un círculo muy cercano.
Todas saben lo que se dice de ellas, lo bueno y lo no tanto. En referencia al bullying: “No son ciegas, ni sordas, ven todo en las redes sociales, leen todo, escuchan todo. No las aislamos de nada. Y hablan de ello. Les afecta”, dice el rey consciente de que, al mismo tiempo, y como parte de la época que les ha tocado vivir tienen que aprender a lidiar con las críticas online.
