María Julia Oliván vivió una mala experiencia en Aeroparque con su hijo Antonio, quien tiene un trastorno dentro del espectro autista. Indignada compartió en sus redes lo que vivió.
Tenía que abordar el vuelo con destino a Punta del Este que tenían con su marido. "Soy una persona educada y espero que me digan que tengo prioridad, aparte lo conté en trescientos millones de canales", dijo indignada porque ignoraron la situación de su hijo.
Así María Julia estalló porque su hijo es discapacitado y tiene prioridad, de acuerdo a las leyes vigentes. "Después, en Migraciones, dije otra vez que tenía un nene con autismo. Era como la quinta vez que lo decía. Por supuesto se me escapó, lo corrí, lo tuve que meter en el baño de discapacitados para aguantar un rato", comentó.
Cuestionó: "¿Nadie de Migraciones ni nadie de Aerolíneas sabe que a una persona con autismo, a una persona con una discapacidad, hay que darle prioridad?... Estaba haciendo otra cola de veinte personas y una persona que estaba atrás mío preguntó si yo no tenía prioridad. Y el de Migraciones dijo ‘que les diga a los de adelante que tiene prioridad".
Entonces, siguió contando: "Por supuesto el personal de Migraciones me empezó a cagar a ped…, a decirme que no me tengo que poner nerviosa, que yo tenía que avisar. Como si fuera algo novedoso la ley de autismo, la ley de discapacidad. No podés ser tan forr… Pero este es un país lleno de forr…".
"Tanta pelotudez con el lenguaje inclusivo, con los cursos de mier… que hacen que gastan una fortuna. ¿En este país nadie sabe lo que hay que hacer con un chico con autismo? ¿Nadie sabe que a una mamá de un chico que se le escapa no es un maleducado, sino que es un chico que tiene un autismo y tiene un montón de estímulos y se pone nervioso?", planteó desde su cuenta de Instagram.
"La próxima me voy a poner un cartel porque es más humillante agarrar a tu pibe del piso quinientas veces y decirle a los brutos de Migraciones y de Seguridad Aeroportuaria que tenés un nene con autismo que ponerte un cartel con un certificado de discapacidad... Encima te revictimizan porque lo tenés que decir ochenta veces. Imagínense, para que yo me sienta mal, que me chupa todo un huevo y que tengo un montón de orgullo por mi hijo, lo que debe ser eso", señaló.
"Hablan del lenguaje inclusivo, escuchan reggaeton, pero cuando hay que incluir realmente tenés que meter a tu nene en un baño porque si no se te escapa, porque nadie sabe una mierd… No somos unos forr… porque nos vamos unos días a otro país y no tengo que estar mostrándome en las redes, humillándome adelante de todos estos nabos que están acá en el aeropuerto, porque tengo un nene con autismo. Porque yo, lo único que tengo por este nene es orgullo. No tengo lástima", cerró indignada por la situación.
Por estas horas, María Julia, su marido y Antonio disfrutan de sus merecidas vacaciones en Punta del Este.
