Que un hijo descubra a sus padres manteniendo relaciones sexuales puede ser tan traumático para unos como para el otro. Para los padres, es un momento de vergüenza y preocupación. Y en los chicos puede despertar curiosidad o puede alarmarlos, aunque la reacción dependerá de la edad que tengan.
En diálogo con Para Ti sobre el tema, Ricardo Antonowicz, psicoanalista, M.N. 11.556, afirma que se trata de un tema complejo y que el impacto que causen esas imágenes dependerá de la edad del niño y de su capacidad de comprender lo que está viendo. "Muchos chicos se pueden asustar, pueden creer que el padre le está pegando o haciendo daño a la madre y mucho dependerá del grado de exhibicionismo que los padres tengan habitualmente frente a sus hijos", explica el psicólogo, también Jefe del Servicio de Psicología del Sanatorio Municipal Dr. Julio Méndez.
"Tengamos en cuenta que hay muchos chicos de condiciones humildes que conviven con sus padres y hermanos en una misma habitación. Para ellos suele ser algo frecuente escuchar ruidos e inclusive ver situaciones comprometidas por las noches. Y de acuerdo a lo cultural, esta información será reprimida o no por el niño", agrega el especialista, también coordinador de actividades asistenciales del Hospital Borda.
Según el psicoanalista, para comprender mejor el tema debemos entender que "la sexualidad se divide en lo meramente sexual, que es poder acariciarse, besarse y abrazarse, y en lo genital, que es lo que comunmente denominamos parte pornográfica". Y añade: "A los chicos suele gustarle que sus padres se besen o abracen, pero ser testigos de un acto genital ya es otra cosa, porque pueden no estar capacitados para entender lo que ven".
Qué se debe hacer
¿Qué debe hacer una pareja que es descubierta manteniendo relaciones sexuales por su hijo? "Primero determinar si el niño comprende el hecho del sexo. Si se trata de un chico que tiene comprensión del tema porque ya se ha hablado en familia y no pregunta nada, entonces no hará falta explicar", asegura Antonowicz.
"Ahora bien, si el niño pregunta, habrá que contestar de acuerdo al nivel intelectual y edad que tenga", aconseja el psicoanalista. "Hay que esperar a que pase el momento de sorpresa y nerviosismo que les haya causado a los padres saber que su hijo los estaba mirando, lo que puede ser traumático tambien para ellos", continúa. "Pero no hay que correr a explicarles nada sino esperar a que ellos pregunten", asegura el psicólogo.
Y agrega: "Y si preguntan habrá que explicarles que mamá y papá se quieren y que por eso se besan y abrazan. Pero no hay ninguna necesidad de hablarle a ningún niño acerca del placer sexual y de la unión de los cuerpos".
Antonowicz explica que también es normal que no pregunten, porque hay un mecanismo que permite reprimir conceptos de sexualidad o genitalidad de manera totalmente normal. Y que por eso, hay chicos que tal vez no necesitan preguntar. "Pero en todo caso, si fuera necesario hablar, habrá que esperar a que pregunten", completa el psicoanalista.
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