La reina impulsó su carrera cuando lo eligió para vestirla el día de su coronación. Ahora acompaña la apuesta de Taminiau por el prêt-à-porter.
Si alguien le dio vuelo y apoyo al diseñador holandés Jan Taminiau, esa es Máxima Zorriagueta. Es que la reina lo eligió para que la vista en uno de los días más importantes para la historia de los Países Bajos: el día de su coronación.
El diseño azul con abrigo-capa que llevó Máxima de Holanda el día de su coronación quedó grabado en la retina de millones de personas y es sin duda una reformulación del estilo real.
“Jamás habría imaginado algo así. Me di cuenta de lo que significaba ese momento y siempre estaré agradecido. Me paraban y felicitaban por la calle. Formar parte de eso y convertirme en inspiración para otros, estar en los libros de Historia...Esas mujeres han permitido cumplir un sueño, pero también tener un equipo trabajando. Y seguir soñando”, le confesó Jan al diario El País en una entrevista reciente.
Máxima lo tiene entre sus diseñadores favoritos y en la sesión de fotos que realizó hace pocos días en el palacio Huis ten Bosch junto a sus tres hijas y su esposo Guillermo, rey de los Países Bajos, volvió a apostar por Jan Taminiau.
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A principios de este año, el diseñador hacía un nueva apuesta y lanzaba su primera colección prêt-à-porter y abría un local en Madrid. Una vez más, Máxima le dio su voto de confianza al elegir un vestido de esta línea de calle para las fotos oficiales de verano.
Se trata de un skirt dress confeccionado en crepe de bamboo con una estamapa batik en la falda. La reina lo acompañó con sandalias color suela en gamuza y unas argollas con piedras verdes engarzadas.
Una vez más, Máxima apostó por Jan Taminiau y el resultado fue a favor de ambos. Ella lució genial y el demostró que su línea de prêt-à-porter es todo un éxito.
