El estilo nórdico es una tendencia decorativa eternamente de moda. Originario de los países del norte de Europa -Noruega, Suecia, Finlandia y Dinamarca- hace más de diez años, tiene como premisa fundamental combatir la falta de luz natural y lograr hogares más confortables, acogedores y felices, ideales para refugiarse durante los largos y fríos inviernos escandinavos.
Pero como todo evoluciona y se reinventa, el nuevo nórdico que empezó a imponerse a finales del año pasado y que marcó su impronta este 2022, más conocido como scandicraft, es mucho más auténtico, sentimental y cercano, haciendo un énfasis especial en las artesanías, las piezas creadas a fuego lento y en los muebles rústicos con curvas suaves.
Catalogado por decoradores e interiositas como "el estilo de decoración favorito del 2022", scandicraft le agrega un extra de calidez al nórdico tradicional y supone un verdadero regreso a lo simple, priorizando la sostenibilidad, el reciclaje y lo hecho a mano.
Scandicraft es la combinación del estilo nórdico ('scandi') con elementos más cálidos, auténticos y artesanales ('craft').
Tips para aplicar el estilo scandicraft en casa
Como regla general, y al igual que en el nórdico tradicional, los colores claros, neutros y pasteles siguen siendo los protagonistas y una apuesta segura para adoptar este nuevo estilo en casa, ya que además de abocar a la naturaleza proporcionan buenas dosis de calidez, suavidad y elegancia. Sin embargo, también se puede dar alguna 'pincelada' en tonos más intensos o apagados como la paleta de los tierra.
Si bien la madera sigue siendo la protagonista estrella, el ratán puede que sean los favoritos debido al regreso del 'cannage'. Otras fibras naturales como mimbre y bambú también se hacen presentes en grandes cantidades privilegiado las creaciones artesanales y más étnicas. Los textiles de lino, lana y algodón.
A diferencia del nórdico tradicional, en el scandicraft hay lugar para las piezas vintage que cuenten una historia, las artesanías y los objetos creados a fuego lento. Así, floreros, jarrones, tapices, alfombras kílim, muebles y objetos reciclados, etc., se apoderan de los espacios interiores para llevar un toque de autenticidad y simpleza reivindicando el valor de lo natural.
La decoración botánica también se hace presente en el nuevo nórdico en forma de flores secas, plantas colgantes, especies de moda con hojas XL, etc. Pero no hace falta llenar el espacio con plantas para crear una deco natural donde reine el bienestar y la frescura. La clave está en no excederse, ya que con incorporar algunas pocas especies, es más que suficiente.
Mientras que el estilo nórdico tradicional se distingue por sus líneas rectas y bien marcadas, el scandicraft apuesta por muebles con formas más cálidas, redondeadas y sin pulir.
