Luego de intensos días que incluyeron presentación oficial, la búsqueda de una casa en donde hospedarse y el retorno a los entrenamientos, Lionel Messi y Antonela Roccuzzo ya se muestran como unos parisinos más. Lejos parece haber quedado la etapa en Barcelona, ciudad en la que el astro del fútbol vivió unas dos décadas.
Así lo demostró su pareja que este martes subió en su cuenta de Instagram, con un público expectante de más de 17 millones de seguidores, el paseo que hizo por un parque de la capital de Francia con Ciro y Abú, el perro de raza caniche que llegó a la familia en octubre del año pasado.
Fin de semana de reencuentros
La llegada de Abú a París se produjo junto con la de Hulk, un imponente Dogo de Burdeos color caramelo que Antonela le regaló a su esposo. La familia había decidido no someter a las mascotas a todo este estrés que significaron los primeros días en la nueva ciudad, por lo que siguieron en España al cuidado de unas personas de confianza.
