El jueves 17 de agosto, la princesa Leonor, hija del rey Felipe VI y la reina Letizia, comenzó una nueva etapa en la Academia General Militar de Zaragoza donde completará sus estudios en la carrera castrense que se desarrollará durante los próximos tres años en los tres Ejércitos.
Tras cumplir con los pasos previos requeridos por el centro, la heredera se encuentra en una fase formativa y ya le dieron sus uniformes que deberá llevar para diferentes ocasiones: allí se encuentran un el traje gris de uso diario, el de color caqui, el de camuflaje para las maniobras y la ropa deportiva.
En las fotos tomadas se puede ver a la heredera vestida con el uniforme militar, sobre el que se puede leer en la solapa de su chaqueta sus dos primeros apellidos Borbón Ortiz y que lleva cosida la bandera de España en la zona superior de la manga.
La princesa Leonor comenzó su carrera militar
Tras una emotiva despedida, Leonor entró las instalaciones del centro militar rodeada de los nuevos cadetes que la acompañarán en esta etapa en la que deberá afrontar los primeros días "con paciencia y esfuerzo, ya que serán duros", según confesó el propio Rey tras decir adiós a su hija.
Al igual que el resto de sus compañeros, la princesa Leonor, reconoció afrontar este desafío con "muchas ganas" pero con algo de nervios.
El primer paso que tuvo que dar la princesa fue el conocer la Academia, luego recogió su uniforme militar y luego comenzó con las clases. Después de dos semanas de iniciación en las que se da a las damas y cadetes la bienvenida, orientación e instrucciones para la adaptación a la vida militar, la princesa y el resto de compañeros comenzarán el curso ordinario.
En una de las actividades tuvo que abrir unas cajas donde se encontraban sus nuevas pertenencias, como algunos de los accesorios que completan su uniforme militar. Un detalle muy llamativo es que prácticamente todos los alumnos lucen en sus muñecas un reloj, pieza que está autorizada por la Academia. También se permite llevar aros que sean iguales entre sí y no cuelguen ni sobresalgan, dos anillos, una pulsera discreta y anteojos.
Su paso por la Academia General Militar de Zaragoza tras regresar de Gales al haber concluido el bachillerato, forma parte de una nueva etapa de formación en el camino hacia el trono de la princesa de Asturias. El año que viene hará lo propio en la Armada, en Galicia, y un año después con el Ejército del Aire, en Murcia.
