Veintiún años después del crimen que conmocionó al país, llegó la resolución por el crimen de la socióloga María Marta García Belsunce. Nicolas Pachelo acaba de ser condenado a prisión perpetua luego de ser uno de los principales sospechosos, luego de que los jueces determinen que fue el quién en el año 2002 ingresó a la vivienda de la familia con la intención de robarles, para luego asesinar de cinco tiros a María Marta.
La casa del country Carmel donde fue asesinada María Marta García Belsunce sigue siendo testigo mudo de aquel trágico suceso. A pesar de las reformas realizadas tanto en el exterior como en el interior, las huellas del pasado siguen presentes, para recordar un episodio aterrador que, finalmente, tiene un culpable.
Desde afuera, se pueden notar los cambios evidentes: el piso de piedras sueltas en el área de estacionamiento fue reemplazado por adoquines firmes, mientras que el pozo ciego, que en su momento fue crucial para la investigación al contener la bala clave, ha sido eliminado al instalarse cloacas en el barrio privado, algo que no existía hace dos décadas.
Al adentrarse en la casa, se puede observar la transformación de algunos espacios. La famosa bañera donde se encontró a María Marta semisumergida ya no es la misma. La grifería y el escalón previo a la bañera, objetos que en su momento generaron especulaciones sobre un posible accidente doméstico, han sido renovados o eliminados. El baño ahora cuenta con un ventanal que aporta luminosidad y un aspecto menos sombrío.
En el dormitorio del primer piso, que solía ser compartido por María Marta y su esposo Carlos Carrascosa, se han realizado modificaciones aunque aún conserva detalles que remiten al pasado, como el atizador que se especuló que la víctima usó para defenderse. La escalera por la que María Marta habría intentado huir aún sigue allí.
En la planta baja, el living se mantiene impecable, con la mesa donde solía jugar al bridge Carlos Carrascosa aún presente, pausada en el tiempo como si aún se esperara una partida con amigos. La oficina que solía ocupar María Marta para sus actividades como socióloga también fuelevemente reformada y ahora es utilizada por el nuevo propietario de la casa, el abogado Gustavo Hechem.
Uno de los puntos más emblemáticos de la casa es el baño, donde se encontraron rastros de sangre tras el crimen. Aunque ha sido reciclado en gran medida, todavía conserva elementos originales como la zona de la bacha, la rejilla del piso y las canillas del bidet. Sin embargo, se tomaron medidas de seguridad, como la eliminación del escalón para ingresar a la bañera y su reemplazo por un hidromasaje nuevo.
Quién es Gustavo Hechem
La casa donde ocurrió el oscuro crimen es hoy habitada por el abogado de Carlos Carrascosa, Gustavo Hechem, quien defendió al viudo durante las dos décadas de eterna batalla legal con los fiscales de la causa para demostrar la inocencia de su defendido y la responsabilidad de Pachelo sobre el crimen de María Marta.
Tras la liberación de prisión de su cliente, quien pasó siete años encarcelado pagando por un crimen que no cometió, el abogado expresó: “Hay una sentencia firme que determinó que Carrascosa ni mató ni encubrió”.
Además, cuando fue consultado sobre las pruebas que hay contra Pachelo, el abogado dijo que “la principal” es que ese 27 de octubre de 2002 “entre las 18.20 y las 18.30 estaba a diez metros de la víctima, a diez metros del lugar del hecho, sin ningún tipo de justificación”.
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