Con un gran protagonismo en todos los desfiles de otoño invierno 2024, las hombreras dominaron la pasarela.
Estuvieron presentes desde los años 30 a los 80, históricamente las hombreras se instalaron en el guardarropas femenino para reforzar estilísticamente la imagen de la mujer en periodos estratégicos.
La próxima temporada se llevarán las hombreras esculturales, muy propia de los años 80, y se apropiarán de todos los abrigos.
Este 2024, los blazers y tapados con hombreras XL y con patrones igual de oversize, se combinan con pantalones deportivo, de cuero o sastreros para acompañar a looks elegantes de invitada, de oficina o a los más informales.
El regreso de las hombreras
Haciendo historia, en plena Segunda Guerra Mundial, las hombreras se popularizaron todavía más cuando las mujeres dejaron de trabajar solamente en el ámbito doméstico para hacerlo, también, fuera de casa; en puestos que hasta el momento solo pertenecían a los hombres.
Los roles de género parecían estar cambiando, pero sin embargo, a pesar de que nacieron temprano, el mundo volvió a dar marcha atrás y con la llegada del New Look de Christian Dior la cintura y las estructuras hiper femeninas volvieron a tomar protagonismo, relegando a las hombreras a un plano secundario, casi, invisible.
Su regreso se hizo de rogar, y en los años 80 fueron la estrella de esta época dorada. Por entonces no solo recuperaron su legado, sino que aumentaron su presencia en la ropa llevándose en su versión más extrema de la mano de otras exclusivas marcas como Ralph Lauren o Giorgio Armani.
Este invierno 2024, este ítem tradicional de la sastrería masculina regresó con mucha fuerza para convertirse en una nueva arma de seducción y empoderamiento femenino.
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