Tras estar varias temporadas dentro del placard, el jardinero volvió a nuestras vidas y, esta vez, para quedarse. La que fuera una de las prendas más características de los años 90 que marcó nuestra infancia, regresó cargado de fuerza y tendencias.
Mery del Cerro fue la encargada de reinsertarlo a los looks comfy de una manera súper canchera y funcional.
Los jardineros vuelven a ser tendencia y so es una buena noticia ya que son prendas que solucionan los dilemas estilísticos en segundos consiguiendo un look fácil, cómodo y favorecedor.
Mery del Cerro, la pionera argentina en adoptarlo
Mery del Cerro fue una de las primeras en adoptarlo y pudimos comprobar que se está convirtiendo en una de sus prendas favoritas. Hace unos días subió a su feed de Instagram unas imágenes donde se la puede ver con un jardinero estampado con flores. Una apuesta muy canchera y romántica que llevó con un suéter debajo para los días de más frío.
También este fin de semana para festejar el cumpleaños de su pareja Meme Bouquet, pudimos ver que adoptó uno de jean y lo combinó con básicos del guardarropas: una remera manga larga, zapatillas y una gorra.
Los jardineros se vuelve a poner de moda
El poder camaleónico de los jardineros es imparable; durante el día, puede llevarse con unas zapatillas o unas sandalias planas y por la noche, cambian radicalmente llevándose con unas botas o sandalias de taco alto.
Desde el clásico jardinero de jean a los estampados y de colores, todos son aptos a la hora de lookearte con onda.
La primavera es seguramente la estación perfecta para poner en práctica los trucos estilísticos del jardinero. Ya sea con una remera rayada, con camisa o incluso con un básico, su comodidad y estilo casual son perfectos para esos días de jornadas interminables o para el fin de semana.
Se trata de una prenda que no deja lugar a medias tintas: o lo amas o lo odias. Los motivos para adorarlo son varios por su versatilidad y funcionalidad a la hora de armar un look.
Pero además de vestirnos de pies a cabeza en un solo segundo , nos conecta con esa parte tan nostálgica del guardarropa. Porque efectivamente, el jardinero está presente en algunos de nuestros muchos recuerdos de los años noventa.
