Meghan Markle dio una gran muestra de estilismo el fin de semana pasado, cuando acompañó a su marido -el príncipe Harry- quien jugó un partido de polo a beneficio con su equipo, Los Padres en el Santa Barbara Polo Club.
La duquesa de Sussex llevó una blusa negra a lunares anudada a la cintura, una falda color hueso, con cinto ancho de cuero, que complementó con capelina y stilettos. Un look veraniego, ideal para este tipo de eventos, que incluye piezas de Khaite, joyería de Cartier, y también las gafas de sol favoritas de Meghan, firmadas por Valentino.
Cabe destacar la similitud del look de la esposa de Harry con aquella icónica estampa de "Vivian" (Julia Roberts) en la comedia romántica de los `90, Mujer Bonita, en la que lucía un vestido marrón a lunares blancos con una capelina, también para asistir a un partido de polo.
En cuanto a su estilismo, Meghan cambió a un registro mucho más royal (similar a los que elegía durante sus años en la Casa Real) dejando un poco de lado los trajes monocromáticos de pantalón ancho y los vestidos cortos. Es ahora, en la antesala de su retorno para las celebraciones del Jubileo de la Reina, que vuelve a los tocados y a las estampas a lunares.
El apasionado de Meghan Markle con el príncipe Harry
Además de llamar la atención por su un gran look, Meghan protagonizó un cariñoso gesto hacia su esposo: tras felicitar a todos los integrantes del equipo con dos besos en las mejillas, le dio un intenso beso en la boca, pero enseguida se dio cuenta de que le había dejado los labios manchados de rojo y, con total naturalidad, le limpió la boca con la mano. Un gesto de total familiaridad que deja ver cómo es la relación entre los duques de Sussex.
