Shaneen Doherty comenzó desde muy chica en la actuación: a los 10 años hizo sus primeras apariciones en series, hasta que logró un papel en las últimas temporadas de La familia Ingalls como Jenny Wilder, la sobrina de Almanzo y Laura.
Pero lo cierto es que Doherty se volvió internacionalmente conocida al protagonizar la serie adolescente más famosa de los `90: Beverly Hills 90210, donde interpretó a Brenda Walsh durante 4 años y, tiempo después, a una de las tres hermanas Halliwell en la exitosa serie Charmed. La carrera de Shaneen continuó en televisión, donde además de actuar, se dedicó a producir.
Pero en 2015 su vida daría un vuelco, ya que fue diagnosticada con cáncer de mama y desde el primer momento se dispuso a enfrentar la enfermedad y a darlo todo para vencerla.
En ese momento, se sometió a un tratamiento para disminuir el tamaño del tumor pero como tenía múltiples quistes tuvo que someterse a una mastectomía, quimioterapia y radioterapia. En 2017 anunció la remisión de la enfermedad.
No obstante, tres años después de aquella esperada noticia, decidió contar no sólo que el cáncer había vuelto, sino que estaba en un estadio avanzado: fase IV. “Es un trago muy amargo en todos los sentidos. Estoy petrificada, muy asustada”, dijo en ese momento, preocupada por su madre y su esposo, el productor Kurt Iswarienco. “Ella es un ser humano extremadamente fuerte y valiente, igual que mi marido, pero estaba preocupada por él”.
Dos años después y con 50 de edad, Shaneen ostenta el mote de #CancerSlayer ("asesina" del cáncer), ya que no solo se propone tener la mejor calidad de vida posible pese al duro diagnóstico, sino que tiene el objetivo de crear conciencia a sus seguidores de la importancia de los controles.
A través de sus vivencias, ella quiere demostrar que es posible vivir junto a la enfermedad y que tenerla no significa renunciar a todo lo que ama y disfruta.
"Espero animar a más gente a hacerse mamografías, no descuidar sus controles y a enfrentar sin miedo lo que sea que te vaya a tocar", declaró.
Por eso (y con una gran fuerza de voluntad) no deja de lado sus actividades e incluso continúa trabajando como actriz: protagonizó dos películas para televisión y contó que también tiene contratos para este año.
"Siempre pensé que el trabajo me completaba, pero ahora lo pienso aún más. Mucha gente con este mismo diagnóstico se da de baja en todo", contó en octubre del año pasado en una entrevista con ABC News. "Se da por descontando que no pueden trabajar o que no pueden hacerlo full time. Y eso no es verdad y es algo que me gustaría que la gente dejara de asumir, darnos la chance de demostrarles que están equivocados".
Y es por eso que Doherty está en contra de hacer una "lista de últimos deseos" o "bucket list": "Prefiero pensar que no tengo cosas que ir tachando de una lista porque mi idea es seguir luchando para estar viva".
