El estilo nórdico no pasa de moda. Incluso cada vez son más las personas que lo eligen para ambientar los diferentes espacios de su hogar. Y es que esta tendencia de decoración, tiene el poder de crear atmósferas luminosas, relajadas y funcionales, ¿y qué mejor que aplicarla en el dormitorio de los más peques de la casa?.
En el marco de la Semana Deco Para Ti, te contamos cuáles son los 5 tips infalibles para decorar habitaciones infantiles con estilo nórdico.
Los nórdicos sí que la tienen clara: son la sociedad más feliz del mundo y su estilo de decoración, inspira al mundo entero. Tal es así, que sigue vigente y cada vez, es más y más popular.
Habitaciones, cocinas, livings, comedores, baños y hasta exteriores, se suman a esta tendencia, y los espacios infantiles no son la excepción.
1. La predominancia del blanco
Una de las máximas del estilo nórdico es crear atmósferas luminosas. Para eso, el color blanco es el aliado perfecto. No sólo aporta una buena dosis de luz, sino que además, tiene el poder de dar más amplitud visual a los diferentes espacios. Paredes, techos, pisos, muebles y textiles se visten de blanco.
2. Colores neutros son ideales
Los colores neutros como el gris ceniza o beige, acompañan al blanco pero sin invadir. Se pueden aplicar en una sola pared o a través de diferentes textiles y parte del mobiliario, dando como resultado un espacio relajado y acogedor. Toques negros, también están presentes pero en menor cantidad aportando una cuota de elegancia.
Los colores fuertes, oscuros y estampados muy cargados, suelen quedar afuera de las habitaciones nórdicas. Lo mismo sucede con las maderas oscuras y desgastadas.
3. La madera: la estrella del estilo nórdico
La madera va a ser la encargada de llevar la dosis de calidez necesaria. Puede estar presente en suelos, techo y en parte -o totalidad- del mobiliario. Eso sí: es clave asegurarse que sea clara para seguir con una línea relajada y sutil. Si bien se puede pintar de colores como el blanco, se recomienda tener al menos una pieza de madera para sumar calidez.
4. Muebles funcionales
En cualquier espacio infantil, se debe buscar la funcionalidad. Para eso, se recomienda utilizar muebles de líneas rectas y simples.
Una buena opción son las camas casita, ya que son ideales para evitar caídas y golpes, sobre todo en los más chicos. Además, permiten libertad de movimiento y el mismísimo método Montessori las recomienda.
5. Accesorios decorativos y fibras naturales
Una alfombra gruesa debajo de la cama que sobresalga por los lados para utilizarla como bajada de cama, cestos de fibras naturales para guardar juguetes, mantas de de lino, algodón o lana, algún cómodo puff y una guirnaldas con luces cálidas, son algunos de los complementos que no pueden faltar en una habitación infantil con aires nórdicos, aportando una buena dosis de calidez.
