Si de plantas del momento hablamos, ficus elástica es una de las que encabezan la lista. Por un lado está su belleza que tiene el poder de conquistar cualquier rincón, transmitiendo una dosis justa de frescura y elegancia. Y por el otro, su resistencia y simples cuidados hacen que sea perfecta para interiores y también, para principiantes.
Cuidados básicos del ficus elástica
1. Al ser de origen tropical, este pequeño “árbol” de interior, soporta las temperaturas altas y los climas secos. Es por eso que uno de los cuidados fundamentales para contribuir a su correcto desarrollo, es ubicarla en un ambiente que tenga luz solar -directa e indirecta-.
2. Su riego debe ser moderado. Lo ideal es hacerlos espaciados y sólo cuando el sustrato se haya secado por completo, ya que es una planta que no tolera el exceso de agua, por lo que contar con un buen drenaje es clave.
En verano se recomienda regarla dos veces por semana y en invierno una vez cada quince días.
3. Si se decide utilizar abono, se recomienda que sea diluido en el agua del riego y especial para plantas verdes. En cuanto a la frecuencia, lo ideal es hacerlo una vez al mes durante su época de crecimiento (primavera y verano), pero en invierno conviene dejarlo reposar.
4. Este tipo de planta debido a su brillo, tiene tendencia a acumular bastante polvo en sus hojas. Es por esto que se recomienda limpiarlas una o dos veces al mes.
5. Para contribuir a su correcto desarrollo si aparecen hojas amarillentas o quemadas, lo ideal es podarlas.
Ficus elástica en exteriores
Si bien lo habitual es encontrar esta especie en macetas, también se puede plantar directamente en tierra. Esto puede resultar un desafío -sobre todo si no se cuenta con experiencia previa-. Sin embargo, con las condiciones adecuadas es una planta que crece a buen ritmo y puede llegar a alcanzar hasta 20 metros de altura.
