El mundo esperaba con atención el desenlace del Cónclave. Pero, puertas adentro, Robert Francis Prevost —hoy Papa León XIV— se tomaba un momento para hablar con su hermano John, horas antes de ingresar a la Capilla Sixtina. Fue una conversación sencilla, profunda, cargada de emociones. “Me dijo que si lo elegían, lo aceptaría como una llamada de Dios, pero que si no, también estaría en paz”, contó John a NBC Chicago.
Una charla en familia antes del Cónclave
Esa última charla entre hermanos no fue sobre poder, política ni teología. Fue sobre la familia, el deber y la humildad. “Estaba sereno. No pensaba en ser Papa. Solo en hacer lo que debía”, agregó.
Cuando finalmente fue elegido como Papa León XIV, el teléfono de John estalló. Estaba en su casa en Florida viendo la transmisión en vivo. “Lloré. No podía creerlo. Es mi hermano, y ahora es el Papa”, confesó en una entrevista con NBC News.
Al día siguiente de su elección como Papa, hablaron nuevamente. El tono fue distinto, pero la cercanía seguía intacta. “Le pregunté si estaba bien. Me dijo que sí, que se sentía tranquilo. Que confiaba en el Espíritu Santo y en lo que vendría”. John asegura que su hermano sigue siendo el mismo hombre sencillo que cocinaba para la familia y que prefería los gestos simples antes que los grandes discursos.
Una preparación inesperada… gracias al cine
Un dato curioso que compartió John fue que Robert había visto, poco antes del cónclave, la película "Conclave" —un drama sobre los procesos del Vaticano—. “La miró para tener una idea de cómo sería todo. Lo ayudó a mentalizarse y a entender la dinámica”, relató entre risas. Aunque parezca increíble, el cine terminó siendo parte de su preparación espiritual.
Además, para aliviar la tensión, Robert y John compartieron momentos jugando a juegos de palabras en línea, como Wordle y Words with Friends. “Primero jugamos al Wordle, porque es una rutina nuestra, luego al Words with Friends”, comentó John. “Es algo para mantener la mente alejada de la realidad”. También bromeó preguntándole si tenía listas sus medias rojas, a lo que Robert respondió con humor.
La mirada íntima detrás del Pontífice
Estas revelaciones no solo muestran al líder religioso, sino también al hombre, al hermano, al hijo. A través de las palabras de John, León XIV se revela como alguien profundamente conectado con sus raíces familiares y con una fe que se vive desde el amor y la cercanía.
En tiempos en los que los líderes mundiales parecen lejanos, esta historia invita a volver a lo esencial: las relaciones humanas, los afectos verdaderos y la búsqueda de sentido.
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