Esto es lo que no tenés que hacer en tu rutina de skincare - Revista Para Ti
 

Esto es lo que no tenés que hacer en tu rutina de skincare

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Si sos de las que cree "ahorrar tiempo" lavando tu cara con agua y jabón, te contamos que es un tremendo error en el cuidado de la piel, porque no le estás dando lo que necesita para verse luminosa y sana. Te contamos cómo lograrlo, con lo que no te puede faltar.
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Gran parte del éxito de una rutina facial es llevarla a cabo con los productos indicados: muchas veces creemos que lo son porque nos convenció lo que prometen o porque los recomendó alguien.

Pero lo cierto es que la clave es probar, ir viendo cómo se comporta nuestra piel después de haber consultado con nuestra dermatóloga, que es quien está capacitada para evaluarla.

Una vez dicho esto, hay muchas mujeres que dicen "no tener tiempo" para limpiarse la cara al terminar el día o antes de irse adormir. Y consideran que lavarse bajo la ducha es suficiente, con el mismo jabón con el que se bañan. O que solamente se enjuagan con agua al levantarse, mientras se lavan los dientes.

Grandes errores que se pagarán cuando el tiempo haya transcurrido y no hayamos hecho nada para acompañar el proceso natural de maduración de la piel hidratándola, higienizándola y dándole lo que necesita.

ola de calor adapta tu rutina de skincare
Foto: Pinterest

Cómo es la correcta higiene de la piel

Después de un largo día el cutis estuvo expuesto a agentes productores de grasa, por lo que es natural que esté alrededor de ella.

El bloqueador solar tampoco queda exento, pues al poseer una ligera base de aceite, queda atrapado en los poros, dando como resultado posible la aparición de granitos.

Por estos motivos, es aconsejable hacer una doble limpieza, con diferentes productos, para higienizar la piel del rostro de verdad.

Primero, podés aplicar una loción limpiadora bifásica, que retire los restos de productos e incluso el maquillaje. También podés optar por una leche limpiadora, que hará una barrida gentil de todo esto, mientras es amable con tu piel.

Una vez retirada la oleosidad, es momento de lavar la cara con un producto que se adapte a tu tipo de piel: hay geles y espumas que limpian en profundidad sin agredirla ni dejarla tirante. No es necesario ir con productos demasiado abrasivos.

Finalmente, la hidratación de la piel mediante una crema y un sérum de fácil absorción, será esencial en toda rutina básica.

Si esta rutina querés emplearla para el día, debés sumar el paso final, que es aplicar el protector solar.

Más información en parati.com.ar

   

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