¿Te considerás una fanática del orden, o todo lo contrario? ¿Te cuesta organizarte?... Estas cuestiones que siempre se han tomado como aspectos de la personalidad, ahora cobran más relevancia a partir de un nuevo estudio científico que sostiene que el orden va de la mano de la salud mental.
Un estudio científico de la Universidad de Nuevo México advirtió sobre el impacto de una vida desorganizada y de tener la casa desordenada en la salud mental. El trabajo publicado en la revista especializada Journal of Enviromental Psychology muestra los efectos negativos del caos en el entorno. No vivir en una casa ordenada afecta nuestra calidad de vida y el bienestar emocional.
Salud mental: consecuencias del desorden en casa
"El desorden puede reducir los sentimientos de felicidad, bienestar y seguridad que una persona obtiene al estar en sus espacios personales", explicó Catherine Roster, coautora del estudio y profesora de la Anderson School of Management de la Universidad de Nuevo México, Albuquerque.
Roster destacó que la desorganización también puede disminuir la capacidad para concentrarse y tomar decisiones. Trabajar en un entorno caótico puede provocar sentimientos de agotamiento.
"Nuestros hogares pueden estar desordenados y abarrotados porque nos sentimos abrumados y desorganizados mentalmente", reconoció Natalie Christine Dattilo, psicóloga clínica con sede en Boston e instructora en la Facultad de Medicina de Harvard.
"El desorden y la desorganización provocan una pérdida de productividad difícil de cuantificar", afirmó el estudio. "La persona promedio probablemente pierde el 5 por ciento de su tiempo debido a la desorganización", concluye el trabajo.
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