Cuando las temperaturas bajan, el cuerpo pide platos calentitos, ricos y reconfortantes. Esta sopa de cebolla con panceta y carne desmenuzada es todo lo que necesitás para atravesar el invierno con alegría. Es una receta simple, de pasos fáciles, con ingredientes que probablemente ya tengas en casa. Te invitamos a prepararla y sorprenderte con su sabor.
Ingredientes para la sopa de cebolla:
- 500 gramos de carne (puede ser roast beef, paleta, osobuco o la que tengas para desmenuzar)
- 4 cebollas grandes
- 150 gramos de panceta en cubos
- 2 dientes de ajo
- 1 litro de caldo de carne
- 1 taza de vino blanco seco (opcional, pero recomendado)
- 3 cucharadas de manteca
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de azúcar
- Sal y pimienta
- Pan tipo baguette
- 150 gramos de queso gruyere o mozzarella rallado
- Tomillo fresco (opcional)
Preparación de la sopa de cebolla:
- Paso 1: En una olla con un poco de aceite, dorá la carne por todos sus lados.
- Paso 2: Agregá caldo hasta cubrirla, condimentá con sal y pimienta y cociná a fuego bajo durante 1 hora y media o hasta que esté bien tierna y se pueda desmenuzar. Si querés hacerlo más rápido, podés usar olla a presión: en 35-40 minutos estará lista.
- Paso 3: Una vez cocida, desmenuzala y reservá.
- Paso 4: Cortá las cebollas en Juliana. En una olla grande, derretí la manteca junto con el aceite de oliva. Agregá las cebollas con una pizca de sal y la cucharadita de azúcar.
- Paso 5: Cociná a fuego bajo, revolviendo cada tanto, durante 40-45 minutos hasta que estén bien doradas y caramelizadas. Este paso requiere paciencia: es la clave del sabor.
- Paso 6: Agregá la panceta en cubos y el ajo picado a las cebollas caramelizadas. Cociná por 5-7 minutos más hasta que la panceta esté doradita y suelte su sabor.
- Paso 7: Verté el vino blanco y raspá bien el fondo de la olla para levantar todo el sabor. Cuando el alcohol se evapore (aproximadamente 3 minutos), sumá el caldo caliente y la carne desmenuzada.
- Paso 8: Cociná a fuego bajo por 15-20 minutos más para que los sabores se integren. Rectificá sal y pimienta a gusto.
- Paso 9: Cortá rodajas de pan y tostalás en horno o sartén. Espolvoreales bastante queso rallado por encima y gratiná hasta que se derrita y esté doradito.
- Paso 10: Serví la sopa bien caliente en bowls hondos. Sumale las tostadas con queso encima o al costado. Si te gusta, podés agregarle un poco de tomillo fresco para darle un toque especial.
Tips y variaciones para potenciar la receta
- Si querés que la sopa tenga más cuerpo, sumá una cucharadita de harina cuando caramelices las cebollas.
- Podés reemplazar el vino blanco por cerveza negra para una versión con sabor más intenso.
- Si te encanta el queso, colocá las tostadas dentro de la sopa, cubrila con más queso y gratiná todo junto en el horno.
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