Desde el salvia suave, al menta o al musgo más apagado, los tonos verdes se imponen de la mano de la moda de sumar naturaleza a los ambientes. Esta tendencia "botánica" llegó para quedarse, pero es cierto que es un color que a veces puede resultar demasiado invasivo, entonces, cuál es la mejor manera de sumarlo a tu casa.
Podés crear tu propio oasis sumando un rincón con plantas de interior, textiles en verde, una lámpara o retapizando un sofá con uno de los tonos de la paleta green.
El verde es el color de año. Con una clara inspiración en la naturaleza, este tono -además- le da un aire de elegancia a los ambientes.
La primera opción es pintar una o varias paredes en color verde. Si no querés cubrir tus paredes con esta tonalidad, podés incluirla a través de la tapicería con sumo acierto.
Buscamos reconectar con lo natural, con la frescura y la calma que solo la naturaleza puede brindarnos. Por eso, el verde se convierte en el color del año.
La mejor opción es combinar este color con los tonos terrosos, la paleta que va del ocre al marrón pasando por los naranjas.
El verde es el color tendencia perfecto para el dormitorio
En la psicología del color, al verde se le atribuyen propiedades relajantes. Así que también es una buena elección para sumar a los dormitorios.
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