¿Sabías que cultivar plantas aromáticas en el interior de la casa está de moda? Albahaca, romero... ¡y menta!
Esta última, además de embriagarte con su irresistible y fresco aroma, cuenta con múltiples beneficios, es fácil de cuidar y se puede cultivar en una taza. Acá te contamos cómo.
Qué vas a necesitar
- Una taza ancha y con 20 cm de profundidad aproximadamente.
- Semillas de menta.
- Tierra.
- Agua.
Procedimiento
- Colocá boca abajo la taza y hacele dos o tres pequeños agujeros que servirán como drenaje.
- Prepará la tierra con el abono y colocala a la taza. Podés regarla un poco para humedecerla.
- Colocá un par de semillas de menta (no muchas) y tápalas con la tierra. Se recomienda evitar ubicarlas al fondo, ya que podría dificultar su crecimiento.
- Ubicá la taza en una zona que reciba abundante luz natural por al menos 6hs diarias.
- Podés agregar un palito con una etiqueta para saber qué planta sembraste.
- Poco a poco, vas a notar que tu planta va creciendo y podés trasplantarla a una área más grande como una maceta o directamente en el jardín.
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