Cuando hace dos semanas la salud de Gerardo Rozín entró en un estado crítico, Carmela Bárbaro decidió hacer una pausa en sus compromisos laborales para poder acompañar a su ex pareja a lo largo de sus últimos días. La breve historia de amor entre ambos les dio una hija en común: Elena, de once años, que está intentando salir del shock que significa haber perdido a su papá de tan chica.
Fue en “Momento D” que revelaron la decisión que tomó la hija del ex diputado Julio Bárbaro, ciclo al que este lunes regresó en medio de un sentido aplauso. “Sólo tengo palabras de agradecimiento para el canal, mis compañeros y los medios en general”, dijo con lágrimas en los ojos.
“No tengo más que palabras de agradecimiento para todos los que están, sobre todo para mi círculo íntimo. Estoy muy acompañada por suerte. Creo que lo mejor que puedo hacer por mí, por mi hija y el hijo de Gerardo es seguir trabajando, seguir adelante y acompañar en lo que se pueda. Así que gracias", dijo.
Carmela Bárbaro agradeció a los medios
“Ha sido ejemplar lo que sucedió. Es una información que tenía mucha gente hace muchísimo tiempo y han respetado magníficamente la voluntad de Gerardo", manifestó al hacer referencia que la noticia de la enfermedad del periodista era conocida por sus colegas desde hace tiempo y que nunca se hizo pública.
Y agregó: “Así como nos criticamos y nos damos con un caño nosotros mismos, y nuestro trabajo, me parece que esto muestra que se puede hacer (periodismo) de otra manera".
