Taylor Swift se convirtió en, prácticamente, una jugadora más de Kansas City Chiefs, equipo que disputa esta noche el clásico partido conocido como Super Bowl, que congrega millones de televidentes al rededor de Estados Unidos y países aficionados al futbol americano.
El partido enfrenta al equipo liderado por el novio de Taylor, Travis Kelce, contra el San Francisco 49ers. Tras oficializar su relación con el deportista, Taylor atrajo un gran interés a los partidos de la NFL con sus presencias especiales y apariciones sorpresa, en medio de una pérdida considerable de interés de las generaciones más jóvenes en el deporte nacional.
Taylor eligió lucir un collar conmemorativo para la fecha: al look total black, le sumó un collar con el número 87, que es el mismo que lleva en la camiseta Travis Kelce adentro de la cancha.
Desde que la protagonista del "Eras Tour" comenzó a aparecer en los partidos de la NFL, las espectadoras femeninas tuvieron un pico nunca antes registrado. Se registró el mayor número de espectadores femeninos en temporada regular desde que comenzó a hacer el seguimiento en hace más de dos décadas, y la mejor temporada regular entre los jóvenes de 18 a 34 años desde hace cinco años.
Taylor se hizo presente en el estadio luciendo un look total black, compuesto por un corset negro con transparencias y un pantalón de jean con detalles de lentejuelas plateadas. Como detalle, eligió una cartera especialmente diseñada para el día por la firma Judith Leiberny, con la forma de la clásica pelota usada en el deporte, sumado al número de camiseta de su novio.
La estrella pop asistió al partido acompañada por sus amigos más íntimos: Lana del Rey, con quien subió a recibir el Grammy a mejor album del año hace solo algunos días, la actríz Blake Lively y la rapera Ice Spice.
Fotos: Redes sociales.
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