Fue el evento de moda que mejor respondió a los reclamos por más diversidad e inclusión en la industria. Y la modelo nacida en Kenia –la primera en lucir un burkini en Sports Illustrated- brilló en el desfile de Tommy Hilfiger y en otros eventos de la NYFW.
Para Halima Aden no hay tabúes ni estereotipos. No hay límites. Hay libertad para romper lo que estaba hecho y, sobre todo, para construir lo que todavía no se hizo.
La modelo musulmana que brilló en el desfile Tommy HilfigerxZendaya otoño 2019, en la reciente Semana de la Moda de Nueva York, fue la primera mujer en usar un hijab en el concurso Miss Estados Unidos (fue Miss Minnesota) -en 2016- y la primera modelo con hijab en las tapas de Vogue UK y Arabia y Allure.
Tiene 21 años y ya es una de las modelos más importantes del mundo, sobre todo porque esta joven nacida en un campo de refugiados en Kenia y que desde los 7 años vive en Estados Unidos es un símbolo de que los reclamos por una moda más diversa e inclusiva están dando buenos resultados.
Y la reciente fashion week neoyorquina –la que más apostó, con solidez y compromiso, por esos valores- es un claro ejemplo. En la Gran Manzana, Halima Aden también participó del show de la diseñadora Sherri Hill, uno de las presentaciones más celebradas de la Semana de la Moda de Nueva York, y en el mega musical “Moulin Rouge” de la marca de The Blonds. Y recibió la distinción “Breakthrough Model of the Year”, algo así como modelo revelación de la temporada.
Topmodel en la pasarela: un ejemplo de vida
La pasarela de la Gran Manzana ya sabe de las conquistas de esta top model somalí-estadounidense: en 2017, Halima Aden fue la primer modelo en usar un hijab sobre su pasarela. Ella reconoce en Carine Roitfeld una “madrina” de su carrera y la que la impulsó hacia los desfiles más importantes del mundo.
“Ser la primera es importante, pero no significa nada si después no hay una segunda, una tercera y una cuarta –dijo en una entrevista sobre su condición de pionera la modelo que forma parte del staff de IMG Models (junto a Bella Hadid, Hailey Bieber, Caroline Murphy, Karlie Kloss y Kate Moss, entre otras)- No quiero que conmigo solo se marque una casilla”, afirma Halima que en cada declaración manifiesta que le interesa ser una imagen conocida siempre y cuando difunda –e instale- cierta conciencia social sobre lo que ella representa.
Es una top de la pasarela, símbolo y referente de inclusión y diversidad que transmite un mensaje positivo: que las mujeres, cualquiera sea su origen, cultura y creencias, pueden hacer lo que quieran –y triunfar- sin renunciar a sus formas de vivir y pensar.
Antes de sus desfiles con Tommy Hilfiger, Halima ya había presentado colecciones de Alberta Ferretti, Maxmara y Yeezy (la colección de Kanye West, el marido de Kim Kardashian). Y siempre con su hiyab arriba de la pasarela.
Y con esa convicción fue que llevó el burkini (creación de Aheda Zanetti, una diseñadora australiana musulmana) en la pasada edición de Sport Illustrated que hoy es todo símbolo. “Significa que muchas más personas ahora están siendo educadas sobre lo que es un burkini, y lo pueden ver como algo lindo, sexy, moderno. Si una niña puede caminar orgullosamente en bikini, ¡bien por ella! si eso es lo que la hace sentir segura. Y si quiero usar mi burkini y eso me hace sentir lo mejor posible, también debería usarlo con orgullo”, declara Aden que también protagonizó campañas de belleza que predican por una mayor inclusión de diferentes tipos de pieles.
Mientras terminás de leer esta nota, seguramente Halima Aden está cumpliendo algún otro pequeño gran paso para la moda que cambia, amplía su perspectiva y crece.
