Lenny Kravitz abrió las puertas de su impresionante casa en París, Francia, para una producción especial para la plataforma internacional Architectural Digest, ¡y el mundo se rindió a los pies de su espectacular mansión!
Sobre todo, conmovieron los detalles de la mansión parisina del cantante que hacen referencia a sus orígenes y el homenaje a su madre.
El refugio íntimo y de lujo en París de Lenny Kravitz
La mansión de Lenny Kravitz en París llama la atención a primera vista por la presencia de valiosas piezas de arte, muebles de autor y guiños personales, a través de un recorrido lleno de detalles estéticos y sentimientos.
Cada rincón cuenta una historia, y en una visita al espacio personal de la estrella pop en la capital francesa el glamour se mezcla con el brutalismo y lo más moderno con lo antiguo y ancestral.
“Apenas entré, supe que esta era mi casa”, expresó el músico al equipo de AD al recibirlos en su casa que empezó a ser suya hace poco más de veinte años, cuando corría el año 2003 y el músico buscaba un departamento en París… Pero lo que encontró fue ¡una mansión!
La propiedad -en el distrito 16 de París, rodeada de jardines y vecina a varias embajadas- había pertenecido a la condesa Anne d'Ornano y escondía una belleza irresistible tras su fachada de estilo clásico francés.
El estilo de la mansión de Lenny Kravitz en París
Con la colaboración de su estudio de diseño Kravitz Design, el cantante rediseñó cada ambiente respetando la arquitectura original, pero sumando su estética personal: elegante, vibrante y ecléctica.
La mansión de Kravitz es un fiel reflejo de su personalidad ecléctica y sofisticada.
"Elegancia con alma", como él mismo describe su estilo, y se traduce en espacios donde el equilibrio entre lo minimalista y lo maximalista es impecable.
Desde el sofá de cuero Terrazza de los años 70, diseñado por Ubald Klug, que adorna su sala de proyecciones subterránea, hasta la imponente mesa de acero pulido y latón con centro giratorio en el comedor, cada pieza está pensada para ofrecer un confort chic sin perder el toque audaz y brutalista que lo caracteriza.
En las paredes, dialogan obras de Andy Warhol y Jean-Michel Basquiat; hay sillones de terciopelo, lámparas escultóricas y una ajustada paleta de materiales nobles, como la madera, el mármol y el cuero.
Definitivamente, una de las piezas más llamativas de la mansión es un original de Basquiat, que refuerza el amor del músico por el arte y la cultura con impronta africana.
La presencia de estos elementos artísticos, mezclados con piezas de diseño ecléctico, como las de la mitad del siglo XX, agregan una capa extra de profundidad a un espacio que es mucho más que un hogar: es una expresión de su vida, su música y su filosofía personal.
El emotivo homenaje a su madre en la casa de Lenny Kravitz en París
Bautizada como “Hôtel de Roxie”, el nombre elegido por Lenny Kravitz para identificar a su mansión en París es un tributo a su madre, la actriz Roxie Roker.
“Ella soñaba con vivir en París. Yo cumplí ese deseo con esta casa”, contó el músico, que también se rodeó de fotos familiares, retratos junto a ella, libros que pertenecieron a la biblioteca de su madre y rincones especialmente diseñados para recordarla.
El Hôtel de Roxie no es solo una mansión parisina. Es un reflejo de los valores y recuerdos de Kravitz, un espacio donde el diseño se entrelaza con el homenaje a su madre, su abuelo y sus raíces africanas.
La biblioteca cálida y silenciosa, está cargada de historia familiar. Y hasta hay un piano Steinway personalizado y dedicado a su madre, Roxie Roker, para tenerla siempre en su memoria y presente en su fabulosa casa en París, donde ella siempre quiso estar.
Cada espacio de la mansión de Lenny Kravitz en París tiene una atmósfera distinta. Hay gran salón inspirado en la figura del célebre boxeador Muhammad Ali, un comedor que celebra la memoria de su abuelo, Albert Roker, simbolizado por un retrato sobre el aparador Paul Evans capturado por el fotógrafo Ruven Afanador. También exhibe un retrato de su madrina Diahann Carroll.
“Él es la razón por la que estoy aquí", contó sobre su abuelo Albert Roker, y explicó cómo el padre de su madre marcó el camino para su familia y su éxito. La pieza en su tributo que preside la mesa, es el corazón emocional de la residencia.
Lenny Kravitz diseñó su propia disco y club nocturno en París
Lenny Kravitz en la portada de la edición española de Architectural Digest.
En el sótano, Lenny diseñó un club nocturno súper exclusivo -con bola de espejos disco incluida- para recibir amigos e invitados.
Si las referencias a su madre representan “el corazón” de la casa, esta discoteca personal, bien puede considerarse “el alma” de la mansión glam de Lenny Kravitz en París.
Para acceder a su club nocturno privado hay que bajar al sótano de la mansión. Es un espacio de recreo y celebración al que Lenny ha dedicado mucho de su creatividad.
Así, lo que fue la sala de calderas de la casa, se convirtió en el espacio más personal y singular de Kravitz en París. Está inspirado en un bar clandestino, cuenta con mesas de bistró francés, está equipado con un sistema de sonido de alta gama y una fascinante bola de discoteca de los años 40 hecha en Alemania.
"Mi hija ha celebrado unas cuantas fiestas aquí", señala Kravitz, en referencia a su hija, Zoë Kravitz, actriz, cantante, modelo, directora de cine y guionista.
El lado zen y espiritual de la casa de Lenny Kravtiz en París
Más allá del lujo y el diseño, la mansión de Lenny Kravitz es también un espacio donde se refleja su conexión con lo espiritual.
El músico ha comentado en varias ocasiones cómo su enfoque de la vida está profundamente influenciado por la meditación y las prácticas espirituales. Esta filosofía de vida se integra perfectamente en su hogar, creando un ambiente de calma y reflexión.
El uso de materiales naturales y la elección de colores que invitan a la serenidad, como los tonos tierra, ayudan a transformar la casa en un refugio de paz.
Cada rincón parece diseñado no solo para inspirar creatividad, sino también para fomentar el equilibrio emocional, lo que hace de esta mansión un verdadero oasis espiritual en el corazón de París.
"Tiene mi onda", resume Lenny Kravitz su casa parisina. Y eso quiere decir que ¡tiene toda la onda!
Fotos: Matthieu Salvaing/Architectural Digest.
